Si llevas un tiempo leyendo este blog, ya estarás al tanto de que Bimba, nuestra perrita, tiene la enfermedad de Addison diagnosticada de hace ya 4 años.

La enfermedad de Addison, también conocida como hipoadrenocorticismo, es una afección que afecta a los perros y se caracteriza por la disminución en la producción de corticoides, hormonas esenciales para el funcionamiento adecuado del cuerpo canino.

En este artículo, exploraremos en detalle esta enfermedad, incluyendo sus causas, síntomas, métodos de diagnóstico y opciones de tratamiento, desde nuestra experiencia con Bimba.

Causas de la Enfermedad de Addison en Perros

La causa más común de la enfermedad de Addison en perros es de origen autoinmune.

En esta variante, el sistema inmunológico del perro comienza a atacar y destruir el tejido de la corteza suprarrenal, que es responsable de producir los corticoides necesarios para el cuerpo.

Este ataque reduce gradualmente la producción hasta que se detiene por completo. Se cree que esta variante puede tener un componente hereditario, y se ha observado con mayor frecuencia en ciertas razas, como el perro de agua portugués, el caniche, el West Highland white terrier, el collie barbudo, el soft coated wheaten terrier, el rottweiler, el leonberger, el gran danés y el crestado chino.

Además de la causa autoinmune, la enfermedad de Addison puede ser desencadenada por tumores en las glándulas suprarrenales o por hemorragias en estas glándulas. 

Síntomas de la Enfermedad de Addison en Perros

Los síntomas de la enfermedad de Addison en perros pueden variar y ser inespecíficos en las etapas iniciales. Algunos de los signos comunes incluyen:

  • Fatiga y debilidad.
  • Vómitos y diarrea.
  • Pérdida de apetito.
  • Pérdida de peso.
  • Valores sanguíneos deficientes.

En casos más graves, los perros pueden experimentar una forma aguda de la enfermedad conocida como crisis Addisoniana. Los síntomas de una crisis Addisoniana pueden incluir:

  • Baja presión arterial.
  • Choque cardiovascular.
  • Deshidratación severa.
  • Alteraciones del ritmo cardíaco.
  • Dolor abdominal.
  • Valores renales elevados.

Es importante destacar que algunos de estos síntomas pueden asemejarse a otras dolencias, como la insuficiencia renal, problemas gastrointestinales, pancreatitis o enfermedades hepáticas, lo que hace que el diagnóstico preciso sea fundamental.

En nuestro caso, Bimba es una perrita mil leches, adoptada de una protectora en la que la dejaron abandonada.

Durante sus primeros 3 años de vida, en ningún momento mostró síntomas visibles de la enfermedad, hasta que un día la encontramos tirada en el suelo sufriendo un shock.

Tras llevarla al hopital veterinario más cercano y tenerla ingresada durante varios días, en los que estuvo al borde de irse, dieron con el Addison.

Por lo que nos comentaron, a Bimba le ocurrió «algo que desencadenó la reacción del Addison«. 

 

Diagnóstico de la Enfermedad de Addison en Perros

En casos de crisis aguda de Addison, es crucial llevar al perro de inmediato al veterinario para recibir atención de emergencia, ya que esta es una afección potencialmente mortal.

Para perros con síntomas menos específicos, el diagnóstico de la enfermedad de Addison generalmente se realiza como parte de un examen más amplio cuando se sospecha algún problema de salud.

Los análisis de sangre desempeñan un papel fundamental en el diagnóstico, ya que pueden revelar alteraciones en los niveles de electrolitos, valores renales elevados y niveles bajos de glucosa en sangre. Un examen específico para diagnosticar la enfermedad de Addison es el llamado «test de estimulación con ACTH». 

 

Tratamiento de la Enfermedad de Addison en Perros

El tratamiento de la enfermedad de Addison en perros depende de la gravedad de la enfermedad y puede incluir varias medidas:

  • En casos de crisis aguda, se administra una inyección de líquidos para corregir la deshidratación y los desequilibrios electrolíticos. También se puede suministrar cortisona en esta etapa para reemplazar los corticoides faltantes.

  • En casos crónicos, como el de Bimba, el tratamiento se basa en el uso de medicamentos orales que contienen tanto mineralocorticoides como glucocorticoides. Estos medicamentos ayudan a restablecer el equilibrio hormonal en el cuerpo del perro. Es un tratamiento diario y de por vida. En nuestro caso, Bimba se toma dos pastillas diarias.

  • En algunas situaciones, puede ser necesario proporcionar suplementos de comprimidos salinos para corregir el equilibrio de sales en el cuerpo del perro.

Es importante destacar que el tratamiento de la enfermedad de Addison es a largo plazo y, en la mayoría de los casos, de por vida.

Los perros que reciben tratamiento pueden llevar una vida normal, aunque pueden ser más susceptibles al estrés, en cuyo caso pueden necesitar dosis adicionales de cortisona temporalmente. También se requieren controles veterinarios periódicos para monitorear la respuesta al tratamiento y ajustar la dosis según sea necesario.

Bimba, después de aquel incidente y de varios años tomando medicación, es una perrita activa, cariñosa y con una vida absolutamente perruna. ¡La disfruta cada día!

El tratamiento no es barato, las visitas al veterinario tampoco. Pero es lo mínimo que podemos hacer a cambio del amor y la felicidad que nos da cada día.

La queremos mucho y esperamos poder hacerle feliz muchísimos más años 🙂